miércoles, 19 de octubre de 2011

PARTE METEOROLÓGICO

Cuando no tengo nada qué decirte, pienso en la forma tan absurda de perder el tiempo con conversaciones clonadas que caminan en código binario. Nos contamos cómo nos ha ido el lunes, que es igual a cómo nos irá el martes y muy parecido a cómo lo será el jueves. “Voy a la ducha”, me dices. Sentado en el sofá con el televisor encendido, noto cómo va perdiéndose todo lo que fuimos un día. Últimamente ni las tormentas nos asustan, ni suenan en tus oídos. Seguimos intactos en nuestros lugares, sin movernos. Últimamente también, no parpadean los móviles con inviernos vencidos en sólo unas pocas de letras. Tú sabes lo que digo cuando no digo nada. Yo no tengo ni la más mínima idea de lo que piensas cuando estás callada. Oscilamos en la escala de grises. Las noticias han dicho que el presidente de Yemen va a abandonar el país. Continúan con los sucesos y los deportes. Están dando el parte meteorológico para los próximos días. Dicen que las temperaturas van a bajar. En ese momento sales del baño, con la toalla trazando la frontera en el tercio inferior de tu esternón, inclinando la cabeza hacia un lado. El mundo se estrella en tu pelo mojado y no importa un carajo nada. “¿Qué cenamos?”. La misma pregunta un día tras otro. Creo que queda algo de pasta. Sabemos que esto no va a ningún lado. Pero quién coño ha dicho que tú y yo queramos ir a algún lado. Quién coño ha dicho que las temperaturas van a bajar cuando estás a medio metro de mí, medio desnuda y con la certeza de que esta noche al final, resulta que no vamos a cenar pasta.

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