DESPUÉS DE HACERLO LENTO VINO EL ROCK AND ROLL

Cuando te giraste, el aire en mis pulmones suplicó un poco más. El oxígeno para ti. Para mí lo que te sobre. Al lado de la ventana no esperábamos que saliera nada y salimos disparados. Con menos frío que al principio. Más ligeros que al comienzo. Con mejores explicaciones cuando decidimos dejar de hablar. Más heridos por si acaso el tiempo nos raja cuando se aburra. Con menos promesas cuanta menos ropa. Me dedicaste tu mejor sonrisa antes del golpe final. Te escribí en la clavícula “No estoy seguro de que existan drogas fuera de tu columna vertebral”. Después de hacerlo lento vino el rock and roll (Fredi Leis). Después aún seguías allí. Con la piel rota no hay miedo a que se rompa algo. Después no podía venir nada mejor.